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Un Verano Sano y Divertido
En Boston y sus alrededores, hay suficientes opciones para los niños en el verano
Ana Rivas
Después de ver su dinero escurrirse en niñeras y a sus cuatro hijos pasar todo un verano entre la televisión y el Nintendo, Ana Alonso aprendió que existen mejores opciones para los niños en las vacaciones.
Así es como este año, sus tres hijos menores pasan los días corriendo, nadando y aprendiendo en el programa de verano del YMCA en la escuela Umana/Barnes Middle School de East Boston, mientras que el mayor asiste a un curso de apoyo escolar. “Están activos, hacen ejercicio, y hasta es más económico,” dijo Alonso, cuya familia calificó para un subsidio y no tiene que pagar la matrícula completa –de $87,50 por semana. Todos los días, ella los pasa a buscar al salir del trabajo --nunca después de las 5 de la tarde, aclaró: “yo me desespero sin ellos.” Y aunque los niños están allí desde las 8 de la mañana, el pasado jueves el menor pedía quedarse un rato más en el gimnasio.
Para familias como la de Alonso, donde el tiempo de las vacaciones de los niños no es el mismo que el de los padres, la ciudad, las organizaciones comunitarias y hasta la policía ofrecen decenas de opciones, para todos los bolsillos y para todas las edades.
El YMCA de East Bosotn tiene, además del programa en que están los niños de Alonso junto con otros 130 niños de entre 5 y 12 años, un programa para otros 75 niños con la escuela Guild Elementary School, informó Christy Famolare, la directora de School Age Child Care. En este momento, los dos están completos, dijo, e insistió en la importancia de comenzar con los programas de después de escuela: “Para tener continuidad y además asegurarle a su niño un lugar en el verano.”
Pero aun hay muchas alternativas abiertas. El centro ABCD (por sus siglas en inglés) con sede en Boston, “trabaja para mantener a las comunidades informadas de los programas de verano,” dijo Jenny Sintron en una entrevista telefónica. “Tenemos un listado extenso, y buscamos una opción que esté de acuerdo con el ingreso de cada familia,” dijo.
María Mesa, que trabaja tiempo completo en el restaurante Mi Rancho de East Boston, tiene a su hijo mayor, de 14, en un campamento por dos semanas, y al menor, de 6, en la “Junior Police Academy” organizada por la Policía de Boston.
Y es que las opciones para los niños en las vacaciones hasta incluyen una verdadera academia de policía, explica el Sgt. Arthur M. McCarthy del Departamento de East Boston. En la academia, que dura una semana, los niños visitan la división de Caninos, donde juegan con los caballos y los perros, la división de balística, y, al final, se celebra con pizza, contó McCarthy a El Planeta.
Los verdaderos campamentos junto al lago, como aquel en el que está el hijo mayor de Mesa, son muy comunes en la zona. East Boston Camps está convocando a los niños hispanos, para las salidas programadas para el próximo mes, dijo a El Planeta el director de campamentos Chris Tremonte. Allí, durante una o dos semanas, los niños van a nadar todos los días, salen de pesca, juegan al básquetbol y hacen muchas otras actividades creativas. Los precios varían entre $180 y $330 por semana, de acuerdo con el poder adquisitivo de la familia, dijo Tremonte. “Los campamentos son muy accesibles, muy seguros, y una gran experiencia para salir de la ciudad en verano,” informó.
“Sí hay opciones, y muchas opciones,” dijo Norma Aguilar, coordinadora comunitaria de Centro Presente en Cambridge. Ella lleva a sus niñas de 6 y 9 años a al Kids Club de una Iglesia Evangélica en Lynn, Mass. “Yo me decidí por esta [opción] porque mis hijas no se iban a levantar a las 7 de la mañana, y además, porque no las sacan afuera,” explicó. Ella y su esposo trabajan tiempo completo, y encontraron la información en la misma escuela a al que van las niñas, antes de que terminaran las clases. “Las escuelas y las organizaciones tienen mucha información, hay que ver bien y buscar que no haya peligros,” recomienda.
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